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LECCIÓN 10 

Tópicos examinados en esta lección: 

1. El primer hombre
2. La equivalencia de la forma
3. La corrección
4. Filtros espirituales 

Resumamos lo que hemos abarcado hasta aquí: 

Adam HaRishon es el único ser creado. Este Partzuf alcanza la altura de los tres mundos: Beriá, Yetzirá y Asiyá. Su cabeza está en el mundo de Beriá, el Garon (Garganta) se expande hasta el Hazeh del mundo de Yetzirá, su Guf (Cuerpo) va desde el Hazeh del mundo de Yetzirá extendiéndose toda la vía hasta los límites de este mundo. El Raglaim (Pies) están en el lugar del mundo de Asiyá. 

¿Cómo están ubicados los países en los mundos? 

Baal HaSulam dice lo siguiente, usando el lenguaje de las Ramas: el mundo de Atzilut es llamado Eretz Yisrael (la Tierra de Israel).  El lugar más cercano (Jordán) está en el lugar del mundo de Beriá.  

En el mandamiento del Creador, dos tribus de Israel, dos partes de las almas, pueden estar situadas en el Jordán (en el mundo de Beriá, como los atributos de este mundo, atributos de Biná), sólo difieren levemente de los atributos del mundo de Atzilut (Jojmá).  

Siria es considera adyacente a Israel, es llamada Maljut del mundo de Beriá. Entonces, desde Maljut del mundo de Beriá hasta el Hazeh del mundo de Yetzirá encontramos la localización de Babilonia.  

Es evidente que la distancia desde el Parsá hasta el Hazeh del mundo de Yetzirá aún corresponde a Eretz Yisrael y es llamada Kibbush David, las conquistas de David.  

El Rey David materializó lo espiritual en nuestro mundo. Todo lo que estudiamos acerca de los espiritual debe ser materializado en este mundo, por lo menos una vez.  

Sólo existen el Creador y el hombre (el deseo de dar placer y el deseo de disfrutar este placer).  

Hay cinco filtros alrededor del hombre, los cuales ocultan la Luz del Creador, cinco mundos.  

Si un hombre actúa naturalmente, de acuerdo a todos sus deseos, él se encuentra a sí mismo bajo la influencia de estos filtros. Todos ellos encima de él.  

Pero si un hombre decide corregirse a sí mismo en concordancia con las propiedades de por lo menos de uno de estos filtros, incluso el más inferior de ellos, él ascenderá. Él permanecerá arriba del filtro y sus atributos se corresponderán con los atributos del mundo dado.  

Además, si sus atributos llegan a ser similares a aquellos de los otros dos mundos, neutralizará también la acción de estos dos filtros y se encontrará a sí mismo arriba de ellos.  

Entonces la Luz del Creador brillará directamente a través de su alma. Todo lo que nos sucede entre la vida y la muerte es una consecuencia de lo que toma lugar en los mundos espirituales.  

La Luz quiere entrar a Maljut sin hacer caso de su condición. El hombre tiene que apartar la Luz aún cuando puede recibirla.  

Estamos ahora experimentando Tzimtzum, y nos hace parecer que el Creador no quiere que lo percibamos, esto es porque Él se oculta  por sí mismo.  

Actualmente, si un hombre por ejemplo, desarrollara una corrección igual al mundo de Asiyá, entonces este hombre está localizado en este mundo.  

Él ha removido el filtro que no necesita, ahora él puede retener la Luz y recibirla por el fin de dar. Luego, comprende que para el Creador no importa si estamos haciendo la restricción por el fin de recibir para Su fin o para el nuestro.  

Simplemente, el hombre por sí mismo alcanza el nivel moral donde no hay distinción entre recibir y dar, verdad y mentira, buenas acciones y transgresiones.  

El hombre por sí mismo elige lo que prefiere. Pero en el lado del Creador solamente hay un deseo, satisfacer al hombre. Este tipo de placer depende del receptor.  

El principal aspecto es que sin ningunas condiciones puestas por el Creador, elegir el ascenso altruista sin recompensa o castigo adicional será atraído.  

Esta elección no está en el castigo (recompensa del nivel), sino en el nivel espiritual más alto donde la ausencia de egoísmo y desapego prevalece.  

El Creador localiza cinco filtros en el frente del hombre, para sellarlo de la Luz divina. Detrás del último, el quinto filtro, el Creador no es sentido de ninguna manera. Aquí es donde nuestro mundo material está localizado.

Allí también, la vida es apoyada por un chispazo pequeño de Luz (Ner Dakik), el cual es el significado de nuestra vida, la suma de todos nuestros deseos desde todas las generaciones, en todas las lamas, desde los albores de la humanidad.  

Esta Luz es como un minuto en que las acciones llevadas acabo por las almas no son consideradas transgresiones, sino simplemente como vida animal mínima.  

No hay restricción en recibir estos mínimos placeres. Vive y regocíjate... 

Sin embargo, si tú quieres más, tienes que llegar a ser similar a lo espiritual. Cada placer espiritual significa comprometerse a una entrega altruista completa sin considerarte a ti mismo.  

Para conseguir esto, es necesario que alcance cierto nivel y actuar como el filtro en sí mismo, por protección de la Luz entrante con la ayuda de su fuerza moral.  

Los filtros entonces cesan de existir para un hombre, siendo capaz de apartar la Luz que se esfuerza en entrar a su Kli. Este hombre recibirá más tarde, pero por el fin del Creador.  

El alma de Adam conforma las 30 Sefirot de los tres mundos de BYA, los cuales representan el mismo mundo de Atzilut, pero están localizados dentro de los deseos egoístas con un Aviut Bet, Aviut Gimel y Aviut Dalet.  

Cuando Adam corrige sus acciones, las espiritualiza, asciende junto con los mundos al mundo de Atzilut.  

Después de pasar a través de los 6,000 grados de corrección, Adam HaRishon asciende completamente al mundo de Atzilut.  

Cada alma, siendo un fragmento del Partzuf de Adam HaRishon sigue la misma vía.

El hombre por sí mismo no puede elegir qué necesita ser corregido, sino qué corrige de lo que es enviado a él desde Arriba, lo que es revelado a él. Y así en adelante hasta el nivel más alto.
 

 

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