1) “Entonces Aarón, alzando sus manos”. Escribe, “Sus manos”, sin una Yod (en hebreo), lo cual significa una mano, pues tenía que alzar la derecha sobre la izquierda.
2) Está escrito en el libro del Rey Salomón que cualquiera que alzaba sus manos sin una plegaria o petición era una persona maldecida por diez poderosos que estuvieran en la ciudad. Estos son diez encargados sobre aquellos que alzan sus manos, para recibir esa plegaria o esa bendición e impartirla para fortificar y honrar el santo Nombre, y él es bendecido abajo. Cuando él es bendecido abajo al alzar sus manos en lo alto, él es bendecido arriba y crece en todo sentido.
3) Esos diez encargados están allí para recibir las bendiciones arriba y para verterlas abajo, para bendecir a aquel que lo bendice a Él, como está escrito, “Y los bendeciré”.