La ley de lo necesario y de lo excesivo
Las leyes modernas para la vida global
Los deseos del ser humano sólo pueden satisfacerse conforme a su propósito natural.
Un individuo tiene deseos físicos y sociales.
Los deseos físicos puede satisfacerlos el individuo. Su propósito es la supervivencia.
Por otra parte, los deseos sociales sólo pueden satisfacerlos los demás. Su propósito es la supervivencia de la sociedad.
Cuando en individuo utiliza sus deseos sociales en forma egoísta, se crea una búsqueda interminable por lograr más. A nivel global, se crea un desequilibrio social, económico y político.
Se puede elegir satisfacer los deseos sociales de dos formas, para sí mismo o para el conjunto.
Obviamente, al elegir la aspiración por el beneficio global se equilibra el excedente global, creando resultados positivos a todos los niveles.
Personaje: Pero lo triste es que todos somos adictos a los excedentes.