La hiperactividad es un fenómeno natural en la nueva generación. Entre un 80% y 90% de los niños son hiperactivos hoy en día. A muchos de ellos se les prescribe Ritalin. A los padres se les dice: “No traigan a su hijo a la escuela si no le ha dado Ritalin”. El Ritalin se ha convertido casi en un requisito en los centros escolares.
Pero esta tendencia está equivocada. La Cabalá explica que las personas cambian de una generación a otra, porque nuestros deseos crecen constantemente. La gente de la nueva generación tiene mayores deseos que las personas de la generación anterior. Por ese motivo, se desarrollan nuevas tecnologías; así avanza la sociedad, y por ende la humanidad. En consecuencia, cada generación es más desarrollada que la anterior.
Hoy, ha llegado una generación especial en la que el ego ha llegado a tal altura que somos incapaces de utilizarlo correctamente. No entendemos a los niños, y en vez de intentarlo, queremos calmarlos, como si quisiéramos detenerlos, encadenarlos con Ritalin. Pero eso sólo limita a la persona, y no le permite desarrollarse.
No es que un niño en particular sea hiperactivo. Sería distinto si uno o dos niños lo fueran, pero hoy, entre el 80% y 90% de los niños muestran ese fenómeno. O sea que la hiperactividad no es de ninguna manera una excepción. Es la característica de esta generación, y la queremos encadenar, ponerla en prisión.
Un niño tiene que correr, saltar, tiene que ser “hiperactivo”, tiene que expresar su energía y sus deseos para poder desarrollarse. Y si lo restringimos, si lo medicamos, ciertamente le causaremos daño, tanto física como mentalmente.
Si la hiperactividad es un fenómeno generalizado, debemos enfocarlo adecuadamente, como algo natural y necesario para el desarrollo. Tenemos que admitir que no sabemos cómo tratar a esos niños, cómo calmarlos, cómo integrarlos en las escuelas y establecer límites. Sea como sea,prescribir Ritalin no es el enfoque correcto.