En memoria del cabalista rabino Baruj Ashlag, 1995
Autor: Rav Dr. Michael Laitman
El Creador actúa sobre nosotros usando varios elementos de nuestro mundo. El hombre debe entender que las cosas que le ocurren no son más que mensajes del Creador. Si el hombre responde correctamente a la acción divina entenderá claramente lo que el Creador espera de él y lo sentirá.
El Creador actúa sobre nosotros no solamente a través de la gente en nuestro medio ambiente, sino que usa cada cosa que existe en nuestro mundo. La estructura de nuestro mundo es tal que el Creador puede influenciarnos y situarnos cerca de la meta de la Creación.
Difícilmente sentimos alguna vez la presencia del Creador en las situaciones diarias que enfrentamos. Esto es por que nuestros atributos nos sitúan opuestos al Creador y hacen imposible para nosotros sentirlo. Tan pronto un hombre adquiere atributos similares a los del Creador, empieza a sentirlo a Él de forma proporcional.
Cuando enfrentamos problemas, necesitamos preguntarnos a nosotros mismos: ¿Por qué me pasa esto?, ¿por qué me está haciendo esto el Creador? Castigos semejantes no existen aunque muchos son mencionados en la Torá. Hay sólo "incentivos" forzando al hombre a progresar sobre lo que él siente de manera egoísta.
El conocimiento de las cosas es sólo un mecanismo auxiliar que nos ayuda a entender lo que sentimos. Cuando contemplamos nuestra vida como un gigantesco salón de clases con el omnisciente Creador actuando como maestro y dándonos a manos llenas el conocimiento que estamos preparados a recibir. Esto progresivamente despierta en nosotros el sentimiento del Creador en nuestros recién nacidos órganos sensoriales de lo espiritual.
El Creador ha hecho una escalera para nuestro ascenso. Esta es una escalera en movimiento que apareció en el sueño de Jacob y fue descrita por el Baal HaSulam, el rabino Yehuda Ashlag y su hijo Baruj Ashlag.
Nosotros damos la espalda a la fuente del conocimiento simbolizado por esta escalera y sólo a través de esfuerzos seremos capaces de retornar y empezar a movernos hacia el Creador. Esta es la razón por lo que el Creador nos envía maestros, libros, así como compañeros de estudio.
El estudiante que sigue las enseñanzas de la Cabalá vive en el mundo físico pero está sobrecargado por su egoísmo. Es por lo que no puede entender propiamente a los sabios que están físicamente cerca de él pero que también se desarrollan en los mundos espirituales.
Si un estudiante puede dejar a un lado su razón, sus opiniones y sigue los caminos expuestos por los escritores de auténticos libros de sabiduría, él será capaz de unirse inconscientemente con los mundos espirituales.
Nosotros no vemos ni sentimos al Creador en nuestro mundo, por lo tanto, es imposible para nosotros hacer que nuestro egoísmo lo rodee a Él. Las enseñanzas de un maestro o profesor pueden penetrar al estudiante e inducir la fe en él. Eso está relacionado con el O.H.P. del maestro (Ozen: Oído, Hotem: Nariz, Pe: boca, representando los vasos espirituales de recepción) llegando hacia abajo al G.E. (Galgata y Einayim, representando los vasos de recepción) del nivel de abajo (por ejemplo, el del alumno). Elevarse al nivel del O.H.P. del maestro significa unirse con su sabiduría y sus pensamientos. Igualmente si un estudiante se introduce en el O.H.P. de un texto de sabiduría, se eleva temporalmente y lo espiritual es revelado a él.
Siempre que leemos los trabajos de los virtuosos, el Baal HaSulam, Simon Bar Yochai, nos unimos directamente con ellos a través de la Luz Circundante, el Or Makif. Entonces somos iluminados y nuestros vasos de recepción purificados. Es importante, cuando leemos, tener en mente la altura del autor. Sea que esté vivo o muerto, realmente no importa.
Todo el tiempo nos podemos unir con él usando nuestros sentimientos cuando estudiamos sus trabajos. Hay muchos caminos que nos llevan al Creador y Él usa muchos medios para actuar sobre nosotros. Cualquier dificultad u obstáculo en la senda del estudiante, en particular la muerte de su maestro, puede ser considerada una oportunidad para transformarse a sí mismo a un nivel individual.
Plática en una cena de la fiesta de Sucot, 1995
Todas las correcciones que toman lugar dentro del partzouf Z"A del mundo de Atzilut ( el prototipo del hombre en nuestro mundo) están incluidas en un proceso nombrado "Sucot". El hombre, el vaso espiritual, el alma, es similar al estado de Z"A en el mundo de Atzilut. La Luz que el alma recibe viene de las interacciones de Biná, Z"A y Maljut en el mundo de Atzilut. Yehuda Ashlag dijo: "La Sucá reúne dos conceptos: el techo que lo cubre, hecho de ramas pequeñas y residuos vegetales. Similarmente si un hombre puede construir una protección contra los placeres de arriba, descubrirá al Creador y a Su gloria."
Cuando un hombre construye el techo de la Sucá, trata de simbolizar la construcción de la pantalla, la masaj que lo habilita a reflejar el placer resultante de la percepción del Creador. Este trabajo es llamado "hombre de ima", es como una plegaria para recibir la fuerza para oponerse al egoísmo. Si la plegaria de un hombre es sincera, la fuerza es enviada a él y así puede recibir la Luz divina con la ayuda de una pantalla. Esta Luz es la Luz de la sabiduría y el entendimiento, la "Or Jojmá". Esta Luz lleva toda la información acerca del presente nivel espiritual del hombre y el grado alcanzado así como los "cómo y por qué" de los eventos que le ocurren.
Una vez que el hombre ha entendido los atributos de este grado espiritual lleva consigo el nombre de este grado. Cada nuevo grado mayor que alcance corresponderá a más perfección y a nuevos nombres mientras se mueva hacia arriba. Durante este proceso nuevos atributos son adquiridos.
La misión de las almas encarnando en nuestro mundo es alcanzar el nivel que ellas mantenían antes de descender y entraran a la carne del cuerpo. Es la tarea del hombre durante una de sus vidas, a pesar de la oposición de su cuerpo, regresar a la raíz de su alma, el nivel espiritual en el cual moraba antes de la encarnación de ésta. Algunas almas sólo necesitan elevarse de nuevo a su nivel anterior. En este caso su senda, por la cual se elevan esta compuesta de 6000 grados llamados "años", de aquí la noción de los 6000 años de existencia del mundo.
Hay también algunas almas especiales que no solamente necesitan regresar a su nivel anterior, sino además completar su progreso a través de los mundos de ABY"A y alcanzar el nivel de partzuf de SA"G en el mundo de Adam Kadmon. Este nivel es llamado "7000 grados" o "7000" años, los cuales también pueden alcanzar el nivel del partzuf de A"B en el mundo de Adam Kadmon llamado "8000 años" o aún más alto, al nivel de partzuf de Galgata llamado "9000 años". Finalmente, algunas almas alcanzan el nivel de "10,000 grados" o "10,000 años" y su conocimiento y percepción las habilita a penetrar al Mundo sin Fin, el Ein Sof. Semejantes almas encarnarán solamente una vez en decenas de generaciones. La humanidad ha atestiguado muy pocas de esas almas. Los grandes cabalistas poseen un alma semejante.
Observando el mandamiento de la construcción de la Sucá se simboliza la fusión al más alto nivel entre el Creador y la creación.
¿Cómo pasa todo esto?
Z"A que comprende 6 sefirot provee la orientación de acuerdo al origen de la Luz: norte, sur, este y oeste, arriba y abajo. Maljut recibe la Luz de sefirot de Z"A, de sus 6 atributos. Esto es por lo cual el etrog es aplicado primero que el lulav al abrir la puerta y pronunciar la bendición. Esto se refiere a la observancia del mandamiento de la Sucá y el lulav. Una persona cumpliendo un mandamiento no debe pensar que con gestos mecánicos completará acciones espirituales. Este nunca es el caso, ¡el hombre no puede completar nada espiritual con la ayuda de sus manos, pies y labios! Una verdadera acción espiritual toma lugar solamente cuando un hombre localiza una pantalla contra sus deseos egoístas, abriéndose a sí mismo a la Luz divina y dedicando sus placeres al Creador.
La fiesta de Sucot dura siete días, en la imagen de la Luz entrando a las siete sefirot de Z"A de Biná. Cada día corresponde a un grado o nivel espiritual, una nueva Luz en una nueva sefirot. El séptimo día, cuando la Luz es transferida de Z"A a Maljut, es llamado "Simjat Torá" (la alegría de la Torá). Esta fase corresponde a la recopilación de toda la Luz recibida por Maljut, la cual desciende dentro de las almas en la Luz llamada Torá. Esta luz no entra a la Sucá, corresponde a una fiesta separada. La Sucá corresponde a la Luz que pasa a través de Z"A con la ayuda de una pantalla durante la celebración de los siete días de Sucot. Simjat Torá corresponde al paso de la Luz de la Torá, Z"A dentro de Maljut y su unión completa.
La noche que precede a Simjat Torá es llamada "Lei hazana raba". Es una noche especial durante la cual toda la Luz Circundante se reúne alrededor de Z"A. Como dicha Luz está a todo el rededor Z"A, este grado es llamado "noche" antes de su transformación a Luz Interior,"Or Pnimi", la cual subsecuentemente entrará a Maljut.
Cualquier acto cumplido con una intención "dedicada al Creador" es espiritual, el mismo acto cumplido con una intención "auto-dirigida" es material y egoísta. Los primeros cabalistas descubrieron que es muy difícil observar físicamente los mandamientos, algo fácil para la gente religiosa, no obstante, debe hacerse un esforzarse en observarlos. Una de las dificultades para el cabalista es que el analiza todos sus pensamientos, acciones y eventos de acuerdo con su impacto en su camino espiritual. Mide la importancia de esos factores en su progresión, en su revelación con el Creador.
A medida que la conexión con el Creador adopta una mayor concentración y esfuerzos interiores contra el egoísmo, el hombre encuentra dificultades en cumplir las obras físicas supuestamente unidas a lo espiritual. Ninguna obra física puede tener influencia en el mundo espiritual, el Creador. La relación entre el hombre y el Creador esta hundida en el corazón del hombre. La observancia mecánica de los mandamientos sigue siendo necesaria por que ésta corresponde al deseo del Creador.
Todos los esfuerzos por sí mismos ayudan al hombre a progresar espiritualmente. Esos esfuerzos le ayudan a enfocarse en la existencia del Creador mientras estudia Cabalá para poder entender Sus actos y alcanzar la meta de la creación. El egoísmo nos permite hacer algo sólo cuando es seguro el beneficio y derivar placer de este. Debemos pedir al Creador ayuda durante la plegaria para contener las fuerzas del egoísmo. Este es el único camino directo hacia Él y a medida que pasa el tiempo, la conexión entre el hombre y el Creador se clarificará por si misma y estará mas firme. Gracias a este proceso el hombre empieza a entender lo que le pasa, por que él experimenta ciertos sentimientos. Esos nuevos estados inducidos son usados como una catapulta que impulsa al hombre al siguiente grado o nivel espiritual.
¿Qué es un secreto o una enseñanza secreta? Un secreto continúa existiendo a menos que el hombre penetre en él. Lo mismo ocurre en la vida diaria que puede ser oscura e incomprensible un día, obvia y muy auto-evidente al otro. Solamente un individuo puede abrir las puertas de un secreto y hacer extenuantes esfuerzos para entender que era lo que no estaba claro antes. No es posible medir los esfuerzos en nuestro estudio porque ellos pertenecen a la esfera de los sentimientos y son, por lo tanto, difíciles de expresar. Es difícil comprender lo que otra gente siente.
Generalmente, hablar sobre todos los esfuerzos hechos en nuestro mundo responde a la misma actividad egoísta. Un hombre que transforma sus placeres al buscar fragmentos pequeños de Luz generalmente se esfuerza en alcanzarlos usando objetos de nuestro mundo. Esto se basa en el hecho de que está motivado por necesidades egoístas. En Cabalá un esfuerzo es lo que el hombre no puede completar sin herir su propio ego. Después de haber probado toda clase de posibilidades en vano, el hombre dirige su mirada al Creador para enviarle sus demandas. Esta es una verdadera plegaria siguiendo un genuino esfuerzo. Sólo el Creador puede sacarnos de nuestro egoísmo, no hay nada que el hombre pueda hacer al respecto. Si el hombre aún vive bajo la impresión de que él puede mejorar espiritualmente o que quedan algunas opciones, el egoísmo le impedirá llorar genuinamente por el Creador.
El egoísmo no traerá la benevolencia del Creador mientras el hombre no se convenza de que si él se rehúsa a seguir el camino de la espiritualidad está muerto y que la jornada sólo puede ser emprendida con ayuda del Creador. Este camino no es similar a ningún otro porque es imposible percibir el siguiente movimiento. Cada nuevo movimiento toma lugar en completa oscuridad y la experiencia pasada queda sin uso en el entendimiento de la progresión futura de uno. Si este no fuera el caso, el hombre usará su razón en lugar de localizar su fe en el Creador por encima de su propio conocimiento y entendimiento.
La autenticidad de los esfuerzos propios y de la dirección apropiada puede ser verificada si uno constantemente redirige sus pensamientos hacia el Creador. Uno debe saber que cada sensación nueva es enviada por el Creador por que ésta corresponde a Su deseo. El Creador nos da lo que podemos entender en el momento preciso. Este proceso es privado y no puede ser comparado con ningún otro. Todo lo que podemos hacer es estar conscientes de nuestro egoísmo, nuestro enemigo y encararlo en lugar de dejarnos llevar por su corriente. Esta etapa es compartida por todos los hombres si bien percibido algo diferente en cada uno de ellos.
No hay un lazo directo entre la intensidad de nuestro egoísmo y la duración de nuestra jornada espiritual. Nada pasa desde fuera, todo está basado en la energía que el hombre invierte en su petición por ayuda al Creador. Esta petición es difícil de formular porque el egoísmo se siente humillado en esta batalla.
Sin la ayuda del Creador y el despliegue de su Luz dentro del Kli, el Kli no se volvería altruista. Sin los atributos de la Luz, el Kli permanecería totalmente egoísta e incapaz de moverse hacia la espiritualidad. No hay otro camino para alcanzar la espiritualidad.
Después de haber explorado todas las opciones, el hombre está convencido que no hay una salida y su egoísmo está listo para aceptar ayuda. En orden de alcanzar este grado, el hombre debe poner permanentemente el plano espiritual por encima del físico, aún si él escoge una meta completamente egoísta en un principio (por ejemplo, el deseo de ganar algo de la espiritualidad.)
Necesitamos usar todos los medios disponibles ahora en el mundo. A medida de que los deseos egoístas disminuyen necesitamos seleccionar medios para mantener nuestro deseo de estudiar Cabalá. Ganar respetabilidad, honores y poder, son factores conductores seguidos por deseos verdaderos para sentir al Creador. Después se vuelve importante ante los ojos del hombre hacer algo para satisfacer al Creador. Nunca debemos descartar los medios a nuestra disposición y al mismo tiempo nunca olvidar que el Creador actúa sobre nosotros usando los diferentes elementos de nuestro mundo.
De la cena "seudá mafseket" antes de "Yom Kipur" (Día del Perdón), 1996
"Talmid jajam", el estudiante del sabio, esos términos describen a quienes directamente con el Creador. ¿Qué puede estudiar uno con el Creador? El único atributo del Creador es satisfacer Su creación. Si el hombre desea adquirir este atributo en orden de satisfacer al Creador justo como el Creador satisface al hombre, el se transforma en el "estudiante del Creador".
Siempre y cuando el hombre haga esfuerzo para trabajar, el Creador oirá su llamada de auxilio. Este proceso deberá ser sincero ya que uno no puede engañar al Creador. El progreso espiritual es una senda interior personal, no es necesario revelarlo a otra gente de otra forma la plegaria de uno puede ser en vano. Cuando las impresiones espirituales empiezan a ser percibidas no hay palabras para describirlas, por lo tanto, un hombre buscando lo divino nunca debe hablar del nivel en el que se encuentra.
Cuando el hombre no piensa en nada más que en progresar hacia el Creador, cuando todo su tiempo y energía están dedicados hacia su progresión, el Creador cumplirá sus deseos.
Al principio el hombre debe saber lo que se requiere para su corrección, pero, no comprende claramente qué es un Kli (vaso) listo para recibir la Luz divina así como la naturaleza de esa Luz.
Los trabajos de Yehuda y Baruj Ashlag proveen instrucciones y métodos globales para progresar espiritualmente. Baal Hashulam nos ha dado especificaciones sobre cómo llevar nuestra progresión espiritual y llevarnos a nosotros mismos más cerca del Creador.
¿Por qué ayunamos durante Yom Kipur? Si a una persona enferma se le pide no comer durante un día completo y vestirse de blanco para curarse de una enfermedad, lo haría por su propio bien. De esta forma muchos hombres cumplen obras apegadas a prescripciones religiosas. Los mandamientos que deben ser observados son sólo aquellos que corresponden a Su voluntad. Nosotros no entendemos cómo lo espiritual está conectado a nuestro mundo y cómo toman los mundos espirituales el aspecto de nuestro mundo material. El hombre estudia, si comprende que no entiende, ésta ya es una verdad. El Creador da al hombre esta impresión porque quiere acercarlo más a Él. En caso opuesto, si Él no quisiera que el hombre se le acercase, le daría satisfacción en su estudio, trabajo, familia. La progresión es posible sólo cuando hay un sentimiento de insatisfacción.
Generalmente el hombre está educado para sentir su propia perfección. Esto es como si los maestros despojaran del hombre las posibilidades de levantarse o caerse. En nuestras sociedades modernas la educación está basada en principios de auto-satisfacción. Esto mata al hombre porque su egoísmo es satisfecho.
Lo mismo se aplica en nuestro desarrollo espiritual porque sólo el grado de insatisfacción alimenta la inspiración para ir más allá de los límites de los hábitos y la pereza, en orden de elevar la espiritualidad. Esfuerzos individuales en calidad y cantidad nos permiten alcanzar la meta que nos hemos fijado para nosotros mismos. Todos los esfuerzos por estudiar, discutir o diseminar la sabiduría de la Cabalá beneficia grandemente a los que lo hacen. Se convierten en una puerta de acceso, permitiendo que otros en nuestro mundo se vuelvan familiares con el Creador.
Para que sea un conocimiento auténtico cabalista debe estar insertado en el corazón del hombre y de sus sentimientos. Las ciencias pueden ser estudiadas pero no modificarán el carácter humano, no requieren del que busca una transformación de su apariencia existencial. Las ciencias solo tratan con una pequeña parte de la creación, en la última parte que está confinada a los límites más estrechos de nuestro mundo. Hoy en día, no obstante, la ciencia ha empezado a descubrir que existe una relación entre la experiencia y el experimentador. En la Cabalá el investigador sólo puede obtener conocimiento si sus cualidades concuerdan con las del tema de su estudio.
Cena de Rosh Jodesh Tishrei (la luna nueva). Sep, 1996
El universo está hecho de dos componentes: el Creador y su deseo de dar placer, así como, la creación y su deseo de recibirlo. El deseo de recibir placer cuando está conectado por una pantalla "a prueba de orgullo" es llamado "partzuf", un elemento espiritual. Cuando el partzuf permite que la Luz del Creador entre y se dedique al Creador éste realiza el "zevoug de akaa". Esta acción es llamada "mandamiento". La Luz en el partzuf es llamada "Torá". Cuando un hombre cumple un mandamiento físico con una intención espiritual recibe la Luz de la Torá. Su egoísmo es corregido y dos mundos son unidos.
Mientras se observan los mandamientos en este mundo, el hombre aún necesita definir qué quiere obtener. La observación mecánica no lleva al progreso espiritual ésta únicamente localiza al hombre en un nivel "espiritualmente inanimado". Sólo la intención puede ayudar al hombre a entrar en un mundo espiritual. Esta también define su nivel espiritual y el grado de percepción de la Luz espiritual, el Creador. "Un mandamiento sin intención es como un cuerpo sin espíritu", refiriéndose a que éste es cumplido en un nivel "espiritualmente inanimado".
La enseñanza de la intención adecuada es el propósito y tarea de la Cabalá. Esta representa la parte escondida de la Torá y está basada en enseñanzas preliminares en el estudio del hombre y en cómo definir sus verdaderas intenciones. Finalmente, el hombre se vuelve consciente de su egoísmo y verdadera naturaleza que fomenta su deseo de recibir placer sin considerar las opiniones, pensamientos y deseos de otra gente.
Cuando se embarca en este viaje espiritual, el hombre no sabe por qué se levanta temprano en la mañana, estudia y atiende lecturas. Todo esto toma lugar inconscientemente. Sólo una vez que el Creador se le haya revelado, el hombre entenderá que fue guiado a actuar de esa forma y así todo se vuelve más claro. Las palabras no pueden existir sin el hombre que las percibe. Sólo cuando el hombre percibe uno de los fragmentos de la infinita y suave Luz llama a "su mundo" el fragmento percibido. Por el contrario, todos los grados del mundo están latentes en el hombre. Esos grados de conocimiento espiritual corresponden a la adquisición progresiva de conocimiento localizado más allá de los límites de nuestro mundo.
El hombre es un punto egoísta en la creación y debe madurar espiritualmente para progresar. Sólo esta maduración - o sea la apertura del punto en el corazón - concuerda con el incentivo inicial, todas las otras acciones se apoyan en esto.
Nosotros estamos animados solamente por el deseo de sentir placer en todas las etapas de nuestro desarrollo. Este deseo es llamado "Klipá" (piel, cáscara) porque ésta fuerza protege al hombre mientras éste no haya alcanzado el nivel donde desee remover la piel para disfrutar el fruto. El fruto es el Klipá enmendado, el deseo de otorgar sin retorno, para satisfacer, justo como el Creador. El Klipá es una fuerza espiritual. El cuerpo espiritual del Klipá está compuesto de una cabeza y un cuerpo. La cabeza del Klipá es llamada "conocimiento" y el cuerpo "deseo de recibir". La "cabeza" de un cuerpo espiritualmente puro es llamada "Fe por encima de la razón" y el "cuerpo" es llamado "la acción de otorgar sin retorno". Solo un estudio asiduo puede sacar al hombre por encima de estados no deseados en los cuales él se hunde sin ayuda. El estudio diario purifica nuestros pensamientos y nos mueve en la dirección correcta.
Pregunta: ¿Por qué decimos "lehaim"- a la vida- cuando brindamos?
El vino simboliza la Luz de "Jojmá", la Luz de la vida. A fin de enfatizar que recibimos la Luz de la vida con la ayuda de una pantalla, decimos "lehaim". De esa forma la Luz recibida brilla sobre nosotros en el nombre de la vida. Esta no es recibida correctamente por vía de los deseos que no están reparados o enmendados. Si ese fuera el caso, la Luz desaparecería y llevaría a la "muerte espiritual".
Pregunta: "¿Hay preguntas equivocadas o inservibles?"
No, por que si hay una pregunta significa que un deseo necesita ser satisfecho, por consiguiente, la pregunta tiene el derecho de ser hecha. Aunque la respuesta sea un poco más compleja. Es algunas veces imposible dar una respuesta debido al hecho de que los sentimientos del que cuestiona difieren de aquellos del que responde. Uno debe encontrar una respuesta a sus propias preguntas.
Si un hombre tiene apuros espirituales esto significa que hay lazos entre él y el Creador. Aún y si no son claramente sentidos esos lazos existen. Sólo el hombre puede encontrar sus propias respuestas aún si no puede entender qué es lo que está pasando.
El mundo espiritual no es nada más que el deseo de recibir y la pantalla (masaj) que se opone a éste. La decisión tomada en el Kli (vaso) empieza como deseo (el Kli egoísta) o con la masaj (un Kli espiritual otorgando sin retorno) o su unión (Kli espiritual recibiendo).
El hombre debe esforzarse para aceptar todo lo que le pasa porque todos los eventos son un medio de progreso espiritual. No hay una receta para cada caso en particular y el hombre debe encontrar lo que puede y lo que no, así como el aplicar los métodos expuestos por nuestros maestros. Cuando un hombre se da cuenta que después de haber tratado no puede escapar del pequeño universo de su egoísmo, le habla a Dios y clama por ayuda. El egoísmo siente que es el principio del fin. Sólo en esta situación sin salida puede el Creador ayudar al hombre, porque el hombre está listo para aceptar su ayuda.
Todos nosotros alcanzaremos el estado de "gmar tikun", la obtención de la corrección. Lo que sea que pase todos alcanzaremos nuestra raíz en el "Ein Sof" (mundo sin fin.) Todo está encaminado a la corrección final, el fin de los deseos egoístas. La noción del Mundo sin Fin en todos los días de la vida difiere radicalmente de su verdadero significado en Cabalá. El estudio de las verdaderas fuentes puede acelerar nuestra progresión hacia lo espiritual y permitirnos vivirlo en esta vida, por lo que es llamado el camino de la Torá. La progresión puede también ocurrir a través del sufrimiento, siguiendo la reencarnación del alma, pero, en cualquier caso el resultado es el mismo. El camino de la Torá no significa reducir el sufrimiento o evitarlo. Esta no es la fuerza conductora de aquel que sigue el camino de la Torá.
El hombre transforma el sufrimiento inducido por deseos egoístas mundanos a sufrimientos correspondientes a la falta de espiritualidad, acortando así acorta el tiempo para llegar a su meta.
Cena de Rosh Jodesh Tevet (la luna nueva), 1995
El deseo del hombre por conocer lo divino iguala las aspiraciones más intensas por conocerse a sí mismo. El egoísmo retraza las aspiraciones del hombre porque la naturaleza de éste es buscar auto-satisfacción y la saturación de sus deseos. Cada vez que el hombre se da por vencido en sus ilusiones inmediatamente desea conocer al Creador, Su fuente, Su verdadera naturaleza.
El Baal HaSulam estaba listo para hablar a todos, para buscar estudiantes y público en un periódico cuyos artículos más tarde se convirtieron en un libro "Matan Torá" (El regalo de la Torá). La paradoja radica en el hecho de que antes hubiera cabalistas y no estudiantes mientras en la actualidad muchos desean estudiar pero no hay cabalistas.
Es la primera vez en la historia que enfrentamos semejante situación. El deseo de estudiar es fomentado de abajo mientras de arriba nos encontramos a nosotros mismos arrojados a la creciente oscuridad espiritual. Esta es una situación constructiva porque da testimonio al hecho de que si nuestro deseo de progresar espiritualmente es genuino las respuestas recibidas serán proporcionales a su intensidad.
¿Qué define el poder de amor entre un hombre y el Creador? Es el grado de sufrimiento y pasión, el grado de sufrimiento debido a la ausencia de Luz dentro del Kli y la pasión que sigue la penetración de la Luz divina cuando la unión toma lugar. Esto significa que si un hombre puede sentir verdaderos deseos dentro de sí mismo, sus deseos serán llenados.
El problema de la gente que trata de entender o percibir los mundos espirituales es que ellos confían en la razón ignorando que ésta es el producto de nuestra naturaleza egoísta. Esta naturaleza evita que nos relacionemos con el mundo espiritual y generalmente los principiantes en Cabalá siguen este camino.
Estamos acostumbrados a incrementar nuestra percepción de cosas primero y después localizar la fe sobre la razón. Esto nos ayuda a entender que el Kli lleno con egoísmo concuerda con el deseo de sentir placer y no la intención de satisfacer al Creador. Un Kli espiritual es el deseo de satisfacer al Creador a través de nuestras obras.
Nosotros abrimos libros y estudiamos tratando de entender con nuestra razón. No obstante es imposible sentir lo que es deletreado por el intelecto. Lo mismo pasa con el umbral (majsom), el cual separa a nuestro mundo del mundo espiritual.
La percepción de las cosas en nuestro cerebro es secundaria porque en él se procesa información y se satisfacen nuestros deseos. El cerebro es sólo un medio auxiliar, tan pronto como un hombre entiende que esta es la llave para mejorar sus sensaciones y no su conciencia de las cosas, el camino a la espiritualidad claramente se abre a sí mismo ante él.
El hombre generalmente no confía en sus sentimientos, primero quiere entender, luego sentir y actuar. Así es que, ¿por qué nos fue dado el cerebro si este es un obstáculo? Para que pudiéramos usarlo y al mismo tiempo progresar al localizar la Fe por encima de la razón. El camino para alcanzarlo está lleno de dificultades y se basa en la prueba y el error. Este camino ayuda al hombre a darse cuenta que todas las situaciones en la vida son ayuda enviada por el Creador para estimular la progresión espiritual.
El Creador envía toda clase de fuerzas que son traídas para que el hombre pueda mejorar su auto-control. Sin embargo, una regla de oro necesita ser aplicada y ésta es secreta. ¡Debemos ocultar nuestra meta a nuestro propio egoísmo y aún mas a otra gente! El estudiante en Cabalá debe comportarse discretamente y no mencionar su meta al primero que llegue. Si éste principio no es cumplido, el estudiante puede acarrear contra él fuerzas negativas muy poderosas.
Cuando los estudiantes de Cabalá se juntan, no deben hablar de su amor por el Creador ni de sus sentimientos del uno por el otro porque al hacerlo sólo expresan sus opiniones personales y pensamientos subjetivos.
La distancia que separa al hombre del Creador es similar a una escalera con peldaños. Nosotros ocupamos el más bajo y el Creador el más alto. Nuestra tarea es subir esta escalera y alcanzar al Creador. Hay algunas formas de progresar. Una consiste en estimulación de abajo, éste es nuestro camino, el hombre anhela espiritualidad y elevación, empieza a leer libros, etc. Otro camino es la estimulación de arriba donde el Creador nos levanta y nos lleva más cerca de Él.
¿Cuál es la diferencia entre esos dos caminos? La estimulación desde arriba corresponde al constante enriquecimiento de nuestro mundo sin hacer caso de todas y cada una de las aspiraciones personales.
Aquellos que manifiestan aspiraciones personales son guiados hacia el estudio de la Cabalá y es preferible para el hombre aprovechar lo que le ha sido enviado. El hombre debe comportarse seriamente en este trabajo así como con las capacidades que son enviadas a él.
Hay treinta y dos chispas dentro de nosotros "lamed bet nitsoutsim", el "lev haeven" o corazón de piedra. Esto corresponde a un tipo de egoísmo que solamente puede ser corregido cuando la Luz general llamada "Mesías" es corregida. Solo este tipo de Luz puede liberarnos del egoísmo. Necesitamos perseverar en nuestros esfuerzos para liberarnos a nosotros mismos del egoísmo y nuestro deseo asistente, el "Mesías" aparecerá y liberará al mundo de sus cadenas.