Sistema: es una totalidad de elementos que existen en relación a, y en conexión el uno al otro, lo cual genera cierta integridad - unidad.
Características de un sistema
En nuestra opinión, el alma es un sistema unido y total del universo; siendo su característica principal la integridad, es decir, la inhabilidad de reducir cualquier sistema a la suma de sus partes. Esto significa que donde existe un alma común, llamada Adam, en realidad sólo esta alma existe. Todas las partes que se han separado no son sus fragmentos separados, sino algo completamente diferente. En un nivel en el cual se reúnan de nuevo en esa estructura común, estas partes ya forman un solo organismo común. Es decir, cualquier estado de cada alma individual, cada objeto individual, está definido sólo por el grado en el que esté conectado con el resto de los objetos. Únicamente en esto podemos encontrar su nivel o grado, para registrar su estado y definir sus cualidades. Podemos caracterizarlo sólo al nivel que es compatible con sus objetos remanentes, como también al nivel en que estos objetos separados, estas almas separadas, se interconectan unas a otras; esto quiere decir que cierto factor común -integridad, esencia, estructura, y orden-, emerge entre ellas. Esta estructura posee una cualidad completamente nueva y diferente. No es una simple suma de estos elementos separados, sino una creación cualitativamente diferente. Es lo que crean juntas, gracias a la interconexión entre cada una. Lo que ha sido creado es una nueva manera de obrar, un sistema totalmente nuevo.
Jerarquía
Cada componente de un sistema se ve a sí mismo como la parte más importante y como el organizador principal de las demás partes. Cada componente de un sistema se comporta exactamente de la misma manera. Cada alma independiente es la principal en relación con el resto de ellas.
Es decir, como resultado de la separación en diferentes partes del alma común y la subsiguiente reconexión, tenemos una situación en la cual éstas se imponen a las demás y cada una de ellas adquiere las cualidades de la asociación entera. Es de común acuerdo que la cantidad de almas individuales después del rompimiento del alma original, el objeto unificado, es de seiscientas mil.
Entonces, nosotros teníamos una sola alma, la cual se quebró en seiscientos mil pedazos, y ahora, reuniéndonos todos juntos, estas piezas forman un nuevo sistema que es equivalente al original, multiplicado por seiscientos mil: estas son seiscientas mil almas individuales, existiendo entre ellas, imponiéndose a cada una de las demás almas. Esto significa que obtenemos un sistema que es absoluto, ya que cada uno de sus elementos es el principal, definiendo y conectando al resto y al mismo tiempo, dejando a los demás conectarse a él.
Pluralidad de descripciones
La pluralidad de descripciones resulta del hecho de que cada objeto original consiste en sus cuatro niveles: inanimado, vegetativo, animado y humano. Por lo cual, cada uno de estos niveles se dividen en varios sub-niveles, etc., lo que significa que, principalmente, es ilimitada en cada una de sus partes y su interacción total. Es por eso que podemos describir un sistema, estructurarlo en cada uno de sus niveles y verlo desde diferentes ángulos; la totalidad de éstos, en general, es equivalente. Nosotros no podemos decir cuál de esas partes es mejor, peor, alta o baja, ya que si el sistema es perfecto (y así resulta al final), entonces cada aspecto de él es también perfecto. Sólo expresa su perfección de diferentes maneras, en un lenguaje diferente. Un hombre puede ser descrito como una planta, un animal, un elemento biológico, social, o espiritual. Y esto incluiría toda su información.
Desde el punto de vista de un psicólogo o un filósofo, la personalidad de un humano es un objeto sistemático que es parte de diferentes sistemas (físico, social, etc.); un humano es un sujeto activo y la personalidad misma es un sistema especial que es abierto y en desarrollo. Sobre esto algunas características específicas se podrían añadir a las comunes, tales como el propósito de la existencia de un ser vivo técnicamente complejo, así como los sistemas sociales y sus habilidades auto-organizativas, cambiando su propia estructura.
La ciencia de la Cabalá tiene la oportunidad de examinar el alma humana como un sistema abierto de auto-desarrollo del universo y de buscar nuevas características de este sistema y nuevas formas de su funcionamiento.