Lo escuché en 1943
En el versículo “No moriré, sino que viviré”, para que uno pueda alcanzar la verdad, debe estar en la sensación de que si no la alcanza, se sentirá como si estuviera muerto. Esto se debe a que desea vivir. Y significa que el versículo: “No moriré, sino que viviré” se refiere a aquel que desea alcanzar la verdad.
Este es el significado de “Yoná Ben Amitay”. “Yoná” (Jonás) proviene de la palabra hebrea Honaá (fraude); y Ben (hijo) proviene de la palabra hebrea Mevín (entiende). Uno entiende porque siempre analiza la situación en la que se encuentra y ve que se ha engañado a sí mismo, y que no está caminando por la senda de la verdad.
Esto se debe a que la verdad significa otorgar, es decir, Lishmá (en nombre de la Torá). Lo contrario a esto son el fraude y el engaño, es decir, solamente recibir, que es Lo Lishmá (no en nombre de la Torá). De este modo, uno luego obtiene “Amitay”, que proviene de la palabra “Emet” (verdad).
Este es el sentido de “tus ojos son como palomas”. Einaim (ojos) de Kedushá (Santidad), llamados “Einaim de la sagrada Shejiná (Divinidad), son Yonim (palomas). Somos engañados y pensamos que ella no tiene Einaim, como está escrito en el sagrado Zóhar, “Una bella doncella sin ojos”.
Lo cierto es que, quien es recompensado con la verdad, ve que ella tiene ojos. A esto se refiere el versículo: “Una novia cuyos ojos son bellos, no hay necesidad de examinar su cuerpo entero”.