Lo escuché a la salida de Rosh haShaná; Jerusalén, 1942
La razón de no comer nueces en Rosh HaShaná (Año Nuevo Judío) es que Egoz (nuez) en Guematria equivale a Jet (pecado). Y preguntó: “¿pero acaso Egoz, en Guematria, no equivale a Tov (bueno)?”. Y contestó que Egoz alude al Árbol del conocimiento del bien y del mal.
Y antes de que alguien vuelva de su camino incierto por amor, la nuez en él sigue siendo un pecado. Y quien ya haya logrado el regreso[1] por amor, sus malicias se tornan en derechos, y resulta que el pecado se convierte en algo bueno, y entonces ya tiene permitido comer nueces. Por eso debemos tener en cuenta que comemos sólo aquello que no tiene rastro alguno de pecado, y que corresponde al Árbol de la vida. Pero las cosas que en Guematría poseen el mismo valor que Jet, aluden al Árbol del conocimiento del bien y del mal.