Copiado de los escritos de mi padre, señor y maestro
En relación a los siete (días) enteros y completos de la santificación de la luna, es habitual esperar siete (días) enteros, y también el final del sagrado Shabat, y no como se acostumbra, que cuando el final del Shabat ocurre en medio de los siete días, santificamos la luna; o cuando de vez en cuando se completan los siete días, no se espera por el final del sagrado Shabat. Esto no es así, puesto que debemos esperar los siete enteros, y particularmente al final del Shabat.
El hecho es que la luna es considerada Maljut, llamada séptima, que viene a ser “Él está en mí”. Quiere decir que cuando el Shabat se llena por los seis días de acción, llamados “Él”, el Shabat dice “Él está en mí”. “Él” es el estado de sol y “mí” es el estado de luna, que recibe toda su luz del sol, y que no tiene nada propio.
No obstante, existen allí dos estados llamados “Shabat” y “Mes”, puesto que Maljut se considera como las cuatro Bejinot (fases) conocidas JuB (Jojmá y Biná) y TuM (Tiféret y Maljut). Las primeras tres Bejinot: Jojmá, Biná y Tiféret, corresponden al Shabat. Estas son las tres comidas referidas e insinuadas en la sagrada Torá a través de las tres veces que dice “este día”. Ciertamente, la Bejiná Dálet (cuarta fase) que hay en ella, representa el final del Shabat o del mes, y no está incluida en “este día”, pues es noche y no día. Y no deberíamos dificultar pues la primera comida del sagrado Shabat también es noche; por lo tanto, ¿por qué la sagrada Torá la llama ‘este día’?”. Pero la noche de Shabat es como “Y será un día único, conocido solo del Señor, ni día ni noche; y sucederá que a la hora de la tarde habrá luz”.
Sin embargo, la noche del fin del Shabat aún es oscura, y no iluminada. Por lo tanto, nuestros sabios nos instruyen en la Torá oral a preparar una mesa al final del Shabat, para también corregir esta oscuridad, esta noche, que aún está sin corregir. Esto recibe el nombre de “Melavé Malká” (escoltando a la reina), manteniendo y complementando a aquel “hueso luzz”[1], que es Bejiná Dálet, que no recibe nada de las tres comidas de Shabat, como ya hemos explicado. Aun así, esta Bejiná Dálet se va completando de acuerdo con el mes del día. Este es el significado de la santificación del mes: Israel santifica los tiempos; es decir, ese residuo de Israel que no es nutrido por la comida de Shabat. Por ende, aun el más grande entre los sacerdotes, que no hay más elevado en cuanto a superioridad de santidad, es, de este modo, advertido para cuidarse de no mancillar ninguno de sus parientes muertos. El escrito le advierte: “salvo por sus parientes más cercanos,…, por ella puede contaminarse”. De todo lo anterior, pueden comprender que toda Kedushá (Santidad) Superior viene del Shabat. Y puesto que ese hueso “luzz”, que es Bejiná Dálet, también llamado “su pariente cercano”, no recibe de la comida de Shabat, y por eso, el gran sacerdote no queda exento de contaminarse por medio de él.
Ciertamente, el significado de la corrección de la santificación del mes se extiende del Shabat y sus iluminaciones. Este es el sentido del versículo “Moisés estaba perplejo hasta que el Creador le enseñó la similitud de una moneda de fuego y le dijo ‘De este modo observa y santifica’”. Esto quiere decir que Moisés estaba muy confundido por no poder santificarlo pues todo el poder de Moisés consiste del Shabat, ya que la Torá fue entregada en Shabat.
Por lo tanto, no puede hallar una corrección para este residuo entre todas las Luces de la sagrada Torá, debido a que este residuo no se alimenta de eso. Y ésta es la causa por la que Moisés estaba perplejo.
¿Y qué hizo el Creador? Lo tomó y moldeó una forma dentro de otra forma, como una moneda de fuego en la que la forma grabada de un lado es diferente a la grabada del otro. Esto nos recuerda lo que dijeron nuestros sabios acerca de la moneda de Abraham: un anciano y una anciana se encontraban de un lado, representando a Bejiná Bet, el atributo de Rajamim (misericordia), y un hombre joven y una doncella se encontraban del otro lado, representando a Bejiná Dálet, el duro atributo de Din (juicio), de las palabras, “ningún hombre la hubo conocido”.
Y estas dos formas colaboraron de manera tal, que cuando el Creador deseó extender hasta allí una corrección de las Luces de Shabat, a través del trabajo de los justos, el Creador les mostró esa forma que se extendía de las primeras tres Bejinot de Maljut. Nosotros lo llamamos Bejiná Bet (segunda fase), y los justos pueden santificarla con las Luces de Shabat. Este es el sentido...